lunes, 10 de julio de 2017

Witch Vomit - A Scream from the Tomb Below


Año: 2016
Sello: Memento Mori (CD) / Headsplit Records (cassette)
País de origen: USA

A este disco debí haberlo reseñado el año pasado. Pero no lo hice, y me dí cuenta de ello hace unos días atrás mientras escuchaba el nuevo EP de este trío de Portland, Oregon. Ahí caí en la cuenta de que lo había escuchado varias veces, pero no había escrito ni una sola palabra al respecto. Craso error de mi parte. Por más que me lleguen toneladas de música por semana para reseñar, lo cierto es que, al menos en éste caso, se me pasó por alto. En fin, vayamos al primer disco full del trío Witch Vomit.
Buen nombre ¿no? Nadie puede decir que estos tipos no eligieron bien su nombre. Encaja a la perfección con el estilo del grupo, tiene fuerza, es tenebroso y asqueroso al mismo tiempo, y es brutal también. O sea, es puro Death Metal. ¿Y la música? También es puro y jodido Death Metal. Y de la vieja escuela, para más datos. Claro, en la banda hay dos miembros de Torture Rack, grupo que ya reseñé y que practica un Death Metal reventado y mórbido, sin concesiones. Pues bien, Witch Vomit tiene entre sus filas a T.T. (cantante y guitarrista), quien es parte de Torture Rack, y en el bajo está Jason, quien cumple la misma función en la ya mencionada banda. Sin embargo, Jason se incorporó a Witch Vomit dos años después de que el grupo naciera. Al comienzo eran dos tipos: T.T. junto a V.V. en batería. Juntos hicieron un Demo, y hasta tocaron en vivo como dúo.
Refiriéndome explícitamente al primer disco de larga duración de esta banda, debo decir que lo de ellos contiene tanto de Autopsy como de lo más putrefacto del Swedish Death Metal, el Death del primer disco, y hasta me atrevo a nombrar a los teutones de Blood. Sí, Death Metal pestilente y macabro, sin rodeos. Los riffs no se alejan nunca de las texturas llenas de horror. Los ritmos son convulsivos y cambiantes, pero contundentes, tal como lo marca el manual del viejo Death Metal. La voz, obviamente, es de ultratumba en todo momento, incluso cuando pega algunos gritos enfermizos que alejan -tan solo un poco- a T.T. del sonido cavernoso.
No escatiman melodía, pero ésta dista mucho de estar cerca de las melodías melosas del Melodic Death actual. En todo caso, si hacen uso de alguna melodía, la misma se asemeja más a las melodías trágicas del Finnish Death Metal que a cualquier otra cosa. Escuchen "The Tomb" para darse cuenta de lo que digo. Y si quieren escuchar algo ganchero pero morboso, con un puñado de riffs adictivos y un tratamiento rítmico cuasi perfecto, escuchen "Witch Cunt", de lo más retorcido del disco. O bien pueden probar con el groove perverso de "Torn from Life".
Ahora bien, si lo que quieren es, a fin de cuentas, escuchar buen Death Metal, mejor escuchen el disco entero. No les digo que van a encontrarse con una obra trascendental ni mucho menos. Pero, y sin temor a equivocarme, puedo decir que se van a encontrar con tres tipos que llevan el Death Metal en la sangre y que no temen desangrarse -vaya paradoja- en pos de alcanzar las más altas cotas de putrefacción. ¿Acaso no se trata de eso el Death Metal?

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